Queremos clientes para muchos años que pongan más acuarios, más grandes y lo aconsejen a sus amigos y familiares. Todos conocemos casos de acuarios iniciados con mucha ilusión, y que tras mucho trabajo e ilusión acaban “en el trastero”, aburridos de gastar en productos “milagro”, de quitar cadáveres y de empezar de cero después de seguir los consejos que habían recibido de la tienda a la que iban.
Nuestra idea es que hay que:
- Empezar bien desde la base, con un acuario de calidad, dimensionado al espacio, a lo que queremos conseguir y al tiempo que queremos dedicar al acuario. Un error en la compra del acuario sale caro, porque corregirlo es difícil.
- La introducción de peces y plantas debe ser escalonada y paciente, y dependerá siempre del acuario que tienes y del tiempo que le quieres dedicar. Es la única manera de tener éxito y minimizar al máximo las “bajas”. Para ello contarás con nuestro asesoramiento en todo momento.
- Hay que saber parar; el acuario siempre tiene un límite de capacidad. No sobrepasarlo es vital. Huye de cualquier establecimiento que te deje comprar todo lo que te apetece 😉
- El mantenimiento del acuario debe seguir unas pautas adecuadas a todo lo anterior: el tamaño, la cantidad de peces que tienes, lo delicados (o no) que éstos sean, la cantidad de plantas etc, etc. Todo esto hay que ponerlo en relación con el tiempo del que dispones, y si ha ido desde el inicio en consonancia, eso que tienes ganado.
Por todo eso, es importantísimo tener una relación estrecha con tu establecimiento, que conozca tu acuario y tus objetivos con él. Nosotros, al menos, consideramos un objetivo básico conocer a nuestros clientes y a sus acuarios para poder aconsejarles en consonancia; otra cosa es despachar y no es nuestro estilo 😉